martes, 13 de agosto de 2013

¿Qué es Sangrado Libre o Liberación Menstrual?



"El sangrado libre es una técnica que te permite liberar tu menstruación de una manera muy parecida a lo que sería vaciar tu vejiga. Esto se debe a que puedes ser consciente de tu cuerpo y sus necesidades básicas. La Menstruación Consciente es un método sencillo y natural que ha sido practicado durante miles de años. Al aplicar este método, fortaleces también tu suelo pélvico y evitas cólicos menstruales.

¡Pero eso es imposible!

Estarás pensando: "Pero el útero no tiene esfínter, entonces ¿cómo podría alguien controlar su sangrado menstrual?"

De hecho, existe evidencia interesante que indica que el cérvix es en realidad un esfínter. Pero aunque éste no fuera el caso, sigue teniendo sentido que pongamos atención a las sensaciones y patrones de nuestro flujo. Después de todo, la mayoría de lxs adultxs no andan por ahí constantmente con moquillos colǵandoles de la nariz, ni siquiera en invierno, aunque tampoco tenemos un esfínter en nuestra cavidad nasal.

Ajá, cómo sea. Yo solo estoy aquí para deshacerme de los cólicos.

¿Y quién podría culparte? Los cólicos pueden ser terribles.

Manejo de los cólicos

Si estás leyendo esto porque quieres aliviar tus cólicos, sigue leyendo! Los cólicos van desde ligeramente inconvenientes hasta espasmos musculares del útero, los cuales pueden ser causados por distintas razones. La discusión sobre el “sangrado libre” apunta hacia el querer retener nuestra menstruación como una de las razones más frecuentes es que inconscientemente queremos retener nuestra menstruación. Esto puede fácilmente convertirse en un círculo vicioso:

Tu útero recoge tu menstruación y espera que la liberes. Cuando no lo haces, tu útero protesta (piensa, por ejemplo, en el dolor que te provoca aguantarte las ganas de orinar). Como te duele, instintivamente contraes los músculos, impidiendo la liberación, y entonces el dolor empeora. Eventualmente, tu menstruación saldrá gota a gota por un cérvix apretado, causando un goteo continuo en lugar de una liberación periódica, y por supuesto, más dolor.

¿Cómo podemos evitar esto?

La respuesta corta es relajándote a consciencia. De eso se trata realmente el Sangrado Libre: reconocer la necesidad de liberar y luego relajar los músculos. El ejercicio pleno de Liberación Menstrual ayuda a aliviar la tensión y cólicos menstruales, pero ¿qué hacer si necesitas estar en un lugar donde no puedes ir al baño cada 15 minutos, o si simplemente no estás interesada en hacer eso.

Ayuda mucho que relajes tus músculos pélvicos para facilitar la liberación. Si no estás practicando el Sangrado Libre, intenta practicarlo usando cualquier tipo de producto que acostumbras usar. Las toallas femeninas de tela permiten más fácilmente la liberación que las tollas desechables, y ambas son mejores que los tampones o la copa menstrual en este sentido. Cuando menos, procura evitar contracciones o tensión en tus músculos pélvicos.

Claro que los cólicos también podrían ser provocados por algo muy distinto, pero cualquiera que sea su origen, la contracción de los músculos pélvicos empeorará tus cólicos, entonces relajarte debe al menos aliviar el dolor.

Cómo evitar “accidentes”

Al principio, cuando estás empezando a experimentar el Sangrado Libre, a entenderlo, habrá varias veces en que tu flujo te tomará por sorpresa. Prepárate para esto, pero no te preocupes. Idealmente, tendrías un espacio adecuado para experimentar durante tu menstruación, y usar una toalla que de preferencia sea de tela orgánica cuando tengas que salir. Si no puedes hacer eso, haz lo que puedas siempre que puedas; no es un compromiso estricto. Conozco mujeres que practican la Liberación Menstrual en las tardes y utilizan una copa menstrual en el trabajo, y mamás que se dedican al hogar y a cuidar a sus hijos pequeños, usando ellas toallas, porque al ser mamás de bebés no tienen la oportunidad de ir al baño cada 3 horas en promedio. Disfruta tus logros, deja que tu cuerpo lentamente aprenda el arte de la liberación y permite que tu cérvix y vagina se contraigan naturalmente entre sesiones de liberación. Recuerda tratarte con a misma paciencia por la que comprenderías que una niña de 2 años necesita mucho cariño, paciencia y confianza.

Durante la noche

Inicialmente, es buena idea usar algún tipo de protector recipiente durante la noche, pero luego encontrarás que durante la noche sangras menos, pues estarás dormida y no consciente. Clar que al despertar, debes pararte e ir a liberar tu menstruación rápidamente, pues tu flujo querrá salir una vez que te despiertes y te pares.

Entonces... ¿qué es lo que tengo que hacer?

Empecemos con lo que NO debes hacer. No se trata de explusar a voluntad tu sangre, ni tampoco sobre cómo retenerla-
Lo que aprenderás, en contraste, sera cómo detectar cuando tu útero necesita liberar tu flujo menstrual y consejos para actuar habiendo este impulso -el resto vendrá con el tiempo.

Lo repetiremos: Esta Consciencia Menstrual no se logra entrenándonos para retener la sangre, se trata de aprender a dejarla fluir cuando la necesidad ésta surja. Con el tiempo, esto les permitirá al útero, cérvix y vagina recuperar la tonicidad muscular perdida y con esto, la habilidad natural de acumular un poco de tu menstruación antes de liberarla sin derrames. Sé paciente contigo misma, y recuerda -solo tienes algunos días al mes para practicar. Casi inmediatamente verás resultados iniciales (como una disminución y alivio en cuanto a cólicos y un patrón básico de “ondas” de liberación) y gradualmente irás notando más avances.

Tips para la relajación necesaria para la liberación menstrual

* Respira lento y profundo, que tu respiración sea con todo tu torso. Concéntrate en tu respiración durante unos pocos minutos. Siente cómo entra el oxígeno y visualiza cómo circula por cada célula de tu cuerpo.
* Siéntate o incluso estando parada de manera que tu pelvis se encuentre en una posición “baja” y relajada. O imagínate algo más que te ayude a visualizar una liberación: agua fluyendo, flores abriéndose, lo que sea.
* Asegúrate que tus músculos estén relajados, especialmente aquellos alrededor de tus ojos y boca, así como entre tus cejas y frente. La tensión facial está íntimamente conectada con la tensión en todos tus esfínteres.
* Medita mientras miras algo frente a ti, escuchas los sonidos de la calle, algo interesante que te sucedió hace poco, lo que sea, mientras te “distraiga”

¿Cómo sabré que debo liberar mi sangre?

Existen tres señales que te ayudarán a saber cuándo debes liberar:

1. De repente sentirás ganas de orinar, pero no con urgencia urgente, y sabrás que no tiene sentido.

Esta es la señal de que debes ir al baño! Esta sensación parecida a las ganas de orinar es simplemente tu cerebro representando de manera equivocada la señal de tu útero de que es el momento de liberar tu menstruaicón. Puesto que “sabes” que no puedes sentir venir tu menstruación, tu cerebro no sabe cómo interpretar la información, entonces interpreta lo más cercano que reconoce. Especialmente al principio de este ejercicio, puedes sentir la necesidad de liberar muy frequentemente - incluso casa 10-15 minutos. No te preocupes, esto es normal y mejorará (aunque los días de flujo abundante son siempre ocupados).

2. Si sientes cólicos o "presientes" que vas a comenzar a experimentarlos

Los cólicos e incomodidad alrededor del útero son una señala para ir al baño y liberar. Con frequencia, estos cólicos son el resultado de tu cuerpo reflexivamente tratando de retener la sangre (pues espera que tú activamente la liberes. Al relajar tus músculos pélvicos y dejar que tu flujo menstrual realmente “fluya” puedes eliminar o aliviar significativamente los cólicos.

3. Sientes que tu menstruación empieza a gotear.
Podrías pensar que ya es demasiado tarde, pero probablemente tengas unos cuantos segundos para correr al baño, quizás hasta un minuto o dos. Esto es porque lo que estás sintiendo es realmente tu flujo menstrual, fluyendo de tu cérvix y hacia tu cavidad vaginal, donde se acumula durante un corto tiempo.

¿Cómo la “libero”?

Primero, encuentra una posición cómoda para sangrar libremente. Muchas mujeres pueden hacerlo cuando orinan, pero quizás debas probar algunas otras posiciones para facilitar el sangrado libre en cualquier otro momento posible. Puede ser desde estar en cucillas completamente o solo parcialmente, sentada con las piernas un poco en alto, doblada hacia el frente, u otras posiciones similares (no es ninguna casualidad que estas mismas posiciones también se recomiendan para partos naturales activos).

Estando en una posición adecuada, relájate. Si alguna vez has meditado o incluso solo soñado despierta, esa experiencia te ayudará. Solo sé paciente y trata de enfocar tu atención en algo más por un momento.

Tips para relajarte:
* Respira lenta y profundamente, con todo tu torso. Concéntrate en tu respiración durante unos minutos. Siente como entra el oxígeno a tu cuerpo.
* Asegúrate que tus músculos faciales están relajados, especialmente los músculos alrededor de la boca y los ojos y entre las cejas. La tensión facial está íntimamente conectda con la tensión del esfínter.
* Enfoca tu atención en algo: un objeto frente a ti, el ruido de la calle, algún evento que te ocurrió durante el día, lo que sea mientras te ayude a relajarte.
* Imagina que tu cérvix se abre suavemente y libera tu menstruación. O dibuja en tu mente escenario o situación que te haga sentir que algo se libera... agua fluyendo, flores abriéndose, lo que sea.

NO hagas ningún esfuerzo por empujar tu menstruación! Esto es importante tanto para tu sangre menstrual como para cualquier otro desecho del cuerpo. El útero, la vejiga y los intestinos poseen músculos involuntarios que se contraen para vaciarse. Al empujar activamente, los músculos voluntarios crean una presión externa en los órganos internos, exprimiendo su contenido para que éste salga. Con esto, se destruye el sistema de retroalimentación de los órganos internos, poniendo en desuso sus músculos y eventualmente aplicando presión y debilitando el suelo pélvico." 

*Fuente: Menstrual Release http://www.menstrualrelease.com/
Traducción por Equipo Helecho Verde 

jueves, 8 de agosto de 2013

Re-conociendo nuestro cuerpo... El cuello del útero

Foto: El Cuello del Útero, una invitación a conocer y reconocer nuestro cuerpo.

El cuello del útero o cérvix es la parte inferior y más estrecha del útero. Se introduce unos 3 cm en la vagina, tomando una apariencia parecida al glande del pene.

¿Cómo puedo conocerlo?

Palpa tu cuello del útero introduciendo los dedos en la vagina (siempre con las manos limpias). Obsérvarlo con la ayuda de un espejito y una linterna abriéndote la vagina con un espéculo, el instrumento que utilizan l@s ginecólog@s. Sólo el hecho de palpar y, sobretodo, de ver le cuello del útero por primera vez cambia radicalmente nuestra relación con el interior de nuestra vagina y útero. Esa parte de nuestro cuerpo habitualmente relegada a ser observada y tocada por otras personas pero que es un gran misterio para una misma, se convierte en un espacio conocido y seguro. ¡Algo muy profundo y crucial cambia en la relación con una misma!

¿Para qué sirve?

Es la puerta de entrada al útero. Se abre cuando el cuerpo quiere que entre o salga alguna cosa del útero (menstruación, semen o bebé) y el resto del tiempo se mantiene cerrado para protegerlo.

La puerta se abre y se cierra con dos mecanismos: el diámetro del agujero y el moco cervical. Para abrirla, los músculos del útero se contraen tirando hacia arriba, de modo que el agujero se dilata y el cuello del útero se retira un poco de la vagina (está alto dentro de la vagina). Por otro lado, el tapón mucoso que sella la entrada se licúa.

¿De qué me informa?

1. Nos ayuda a reconocer si estamos fértiles o no (junto a otros indicadores, sólo no es lo bastante fiable).

2. Nos informa de en qué momento del Ciclo estamos.

3. Finalmente, un buen conocimiento del cuello del útero nos facilitará el darnos cuenta de posibles infecciones de transmisión sexual y otros problemas de salud.

¿Qué tipos hay?

Las variaciones más significativas que apreciamos en el cuello del útero pueden resumirse en tres características:

El grado de apertura del orificio: se aprecia más abierto o más cerrado.
La rigidez: blando (como los labios) o duro (como la punta de la nariz) .
La posición, considerando dos variables: alto (retirado de la vagina) o bajo (más introducido en la vagina); recto (alineado con la vagina, se ve el agujero) o inclinado (mira hacia la pared de la vagina, no se ve el orificio).
Palpando el cuello del útero podemos identificar los periodos fértiles e infértiles:

- Periodo fértil: el agujero estará abierto, alto, recto y blando.

- Periodo infértil: el agujero estará cerrado, bajo, inclinado y duro.

¿Qué tipo de cuello del útero se corresponde a cada fase?

Agujero abierto, alto, recto y blando =  Fases de apertura (Arquera y Madre, es decir, preovulatoria y ovulatoria).

Agujero cerrado, bajo, inclinado y duro = Inicio de la Arquera, final de la Madre y Hechicera (premenstrual).

Fuente: Viaje al Ciclo Menstrual.


El cuello del útero o cérvix es la parte inferior y más estrecha del útero. Se introduce unos 3 cm en la vagina, tomando una apariencia parecida al glande del pene.

¿Cómo puedo conocerlo?

Palpa tu cuello del útero introduciendo los dedos en la vagina (siempre con las manos limpias). Observarlo con la ayuda de un espejito y una linterna abriéndote la vagina con un espéculo, el instrumento que utilizan l@s ginecólog@s. Sólo el hecho de palpar y, sobretodo, de ver le cuello del útero por primera vez cambia radicalmente nuestra relación con el interior de nuestra vagina y útero. Esa parte de nuestro cuerpo habitualmente relegada a ser observada y tocada por otras personas pero que es un gran misterio para una misma, se convierte en un espacio conocido y seguro. ¡Algo muy profundo y crucial cambia en la relación con una misma!

¿Para qué sirve?

Es la puerta de entrada al útero. Se abre cuando el cuerpo quiere que entre o salga alguna cosa del útero (menstruación, semen o bebé) y el resto del tiempo se mantiene cerrado para protegerlo.

La puerta se abre y se cierra con dos mecanismos: el diámetro del agujero y el moco cervical. Para abrirla, los músculos del útero se contraen tirando hacia arriba, de modo que el agujero se dilata y el cuello del útero se retira un poco de la vagina (está alto dentro de la vagina). Por otro lado, el tapón mucoso que sella la entrada se licúa.

¿De qué me informa?

1. Nos ayuda a reconocer si estamos fértiles o no (junto a otros indicadores, sólo no es lo bastante fiable).

2. Nos informa de en qué momento del Ciclo estamos.

3. Finalmente, un buen conocimiento del cuello del útero nos facilitará el darnos cuenta de posibles infecciones de transmisión sexual y otros problemas de salud.


¿Qué tipos hay?

Las variaciones más significativas que apreciamos en el cuello del útero pueden resumirse en tres características:

- El grado de apertura del orificio: se aprecia más abierto o más cerrado.
- La rigidez: blando (como los labios) o duro (como la punta de la nariz) .
- La posición, considerando dos variables: alto (retirado de la vagina) o bajo (más introducido en la vagina); recto (alineado con la vagina, se ve el agujero) o inclinado (mira hacia la pared de la vagina, no se ve el orificio).

Palpando el cuello del útero podemos identificar los periodos fértiles e infértiles:

- Periodo fértil: el agujero estará abierto, alto, recto y blando.
- Periodo infértil: el agujero estará cerrado, bajo, inclinado y duro.

¿Qué tipo de cuello del útero se corresponde a cada fase?

Agujero abierto, alto, recto y blando = Fases de apertura (Arquera o Doncella y Madre, es decir, preovulatoria y ovulatoria).

Agujero cerrado, bajo, inclinado y duro = Inicio de la Arquera, final de la Madre y Hechicera (premenstrual).

Anna Salvia Ribera
www.viajealciclomenstrual.com

jueves, 1 de agosto de 2013

Feliz Día de la Pachamama


Hoy, 1 de Agosto, celebramos el día de la Pachamama, Mamapacha, Madre Tierra, Gran Diosa de la Vida.... 

Para honrarla te propongo encender al atardecer de hoy una de las Llamas Sagradas que tengas (Brighit, Reina Solar, Avalon, Iberia...) o cualquier otra vela, con la intención de enviar Luz, Amor, Alegría y Gratitud a nuestra querida Pacha... ella que nos sostiene, nos nutre, nos cuida, nos da la vida.... 

Al atardecer de esta tarde, enciende tu vela y sostenla hasta el atardecer de mañana, y mientras tanto, honra a la Gran Diosa en todos tus actos cotidianos!!!! 

Como ella te enseña... comparte, celebra, se generos@, agradece, cuida, bendice... 

Re-unete de nuevo con ella y entragale tus ofrendas... sanandola...sanandote... volviendo al Origen!!! 

Feliz día para tod@s!!! 

Una canción para honrar a nuestra "Pachamamiña"...

Madre te siento... 
bajo mis pies... 
escucho los latidos de tu corazoooonnnn... 
heya heya heya heya heya heya he... 
heya heya heya heya heya hoooooooooooo…..

Erika Falcón. Sacerdotisa de la Diosa.

Plegaria a la Pachamana

Querida Pachamama, tú que reinas en el Universo con la inteligencia del sano equilibrio, escucha a tus hijos, intercede por nosotros con los grandes vientos, habla con el agua, con el fuego y con la tierra.

Hoy te pedimos dibujar la esperanza en nuestros rostros, dános la gracia de tu aliento eterno, cobíjanos con tu brillante Sol, guíanos en la noche de nuestras vidas con la luz de las estrellas y la sabia luna, acompáñanos en nuestro viaje visionario por medio del sueño sagrado y los tambores de luz.

Hoy te pedimos regresar las fuerzas de tempestad a su sitio, te pedimos calmar las aguas turbias, aquietar el fuego interno.

Que tu sabia inteligencia se lleve muy dentro nosotros aquello que pulula y exacerba en exceso creando caos. Hoy te pedimos que nos acompañes en la curación de nuestro cuerpo y espíritu.

Tú que eres sabia haz de nosotros tus hijos instrumento de salvación, hoy te pedimos que tu manto de luz nos purifique y sane las heridas y errores de nuestro pasado, te pedimos que nos ayudes a limpiar nuestro sendero de luz.

Querida Pachamama te glorificamos por tus flores, tus fragancias, la abundancia de tus alimentos y las aguas que hemos de beber.

En agradecimiento te brindo mis sensibles prédicas, te rindo culto, te hablo en meditación y silencio, siempre muy presente estás en mis plegarias.

Querida Pachamama, me comprometo a limpiar mis pasos errados, mis equivocados pensamientos y desleales actitudes, me comprometo en beber del río sano, en curar mis hermanos los animales y proteger los bosques, hoy me comprometo a dar alimento al pobre y quién estira la mano.

En ti nuestra vida nace, crece y reposa, en ti nuestra vida se enciende y se apaga. Somos tu luz, somos tu cuerpo, tu espíritu. Con solemnidad llegaré a ti convertido en polvo cuando mejor lo decidas.

Munay pachamama, munay, ¡MUNAY!.

A. Quispe